Las mujeres necesitan más hierro

Las mujeres en edad fértil es uno de los grupos con mayor predisposición a tener niveles bajos de hierro.

El foco se centra en las mujeres embarazadas y en período de lactancia. Sin embargo, incluso sin embarazo, el equilibrio de hierro en las mujeres está en una situación delicada. El cuerpo necesita hierro para la formación de células y sangre, así como para numerosos procesos metabólicos, incluida la producción de energía. El médico puede determinar el estado del oligoelemento en el cuerpo mediante los valores sanguíneos. La ferritina sérica muestra lo llenos que están los depósitos. A partir de la pubertad, estos valores disminuyen en las mujeres por debajo de los de las personas de sexo masculino. La menstruación, es decir, la pérdida de sangre cíclica, cobra su precio. Aproximadamente dos tercios del hierro corporal están vinculados a los glóbulos rojos y la pérdida de sangre durante un periodo normal es de aproximadamente 30 ml (= 15 mg de hierro) y permanece constante durante muchos años.

La compensación solo es posible a través de la alimentación. El cuerpo no puede producir hierro por sí mismo. Para asegurarse un equilibrio de hierro adecuado, las mujeres que menstrúan deben consumir alrededor de 15 mg de hierro diariamente con las comidas. Incluso la menstruación cíclica normal puede llevar a una ligera deficiencia de hierro en las mujeres a lo largo de los años.

Alto requerimiento de hierro en ciertas etapas de la vida

En las mujeres embarazadas, se suma la mayor demanda debida a la formación de células y sangre para el feto, las pérdidas de sangre durante el parto y luego las pérdidas de hierro a través de la leche materna durante la lactancia. En muchos casos, la compensación solo a través de la alimentación es casi imposible.

La situación también puede volverse crítica justo antes de la menopausia, cuando la menstruación puede prolongarse y ser especialmente intensa debido a la transición hormonal. También fluctuaciones hormonales durante la pubertad a menudo provocan sangrados abundantes. Debido a que aquí, además, los estirones de crecimiento con formación de células y sangre agotan las reservas de hierro, las jóvenes están riesgo de desarrollar una deficiencia de hierro, especialmente si una dieta unilateral y reducida no proporciona suficiente suministro.

Fuentes

• Nielsen, P.: Diagnostik und Therapie von Eisenmangel mit und ohne Anämie (Bremen 2016).
• Deutsche Gesellschaft für Ernährung e.V.: Referenzwerte Eisen (2017).
• Hallberg, L. et al.: Constancy of individual menstrual blood loss, in: Acta Obstet Gynecol Scand (1964).